sábado, 29 de mayo de 2010

San Manuel Bueno y Mártir (Miguel de Unamuno)

Tras leer el texto de San Manuel, lo único que puedo decir, es que no fue nada de lo que yo realmente esperaba, sobre todo en la parte del clímax dentro de la misma historia; pasaron por mi cabeza millones de ideas pero ninguna se asemejaba a la causa real que era la falta de fe del protagonista, y esto me dejo con una sensación entre sorprendida y desilusionada a la vez. Me sorprendió su manera de envolver a la gente con su fachada de “hombre ideal en el camino del señor” y en cómo la gente lo veía como la mejor persona del mundo, un ejemplo a seguir y del cual nadie podía escapar siquiera llegar a imitar.

Admito que mi desilusión principal radica en que no esperaba que su gran secreto fuese el no creer realmente lo que el predicaba con tanto fervor a su pueblo, en cambio si creía en una especie de amor oculto hacia su fiel amigo ya convertido por él, Lázaro; por que inevitablemente me cae la duda de porqué fue él quien supo la verdad sobre San Manuel, que fue lo que vio en él y no lo tenía el resto, será acaso que los otros ya se encontraban demasiado convencidos en su propia falacia creada por ellos mismos y avalada por los dichos de su San Manuel, quién sabe, me quede con las ganas de que el texto continuara desde mi punto de vista, la historia daba para mas desarrollo, una segunda parte talvez.

Mi critica mas personal y la cual va mas allá de la historia, recalca en la semejanza paralela que es posible hacer entre los habitantes de la aldea de Valverde de Lucerna y una buena parte de la sociedad en la cual nos desenvolvemos, ambas creen en hechos y en personas las cuales a todas luces te están engañando, necesitamos siempre tener algo o alguien en quien creer, confiar, ver como superior y así tener un modelo seguir y al cual también envidiar.

Muchas veces nos escondemos en lo que no es realmente importante, quizás lo vemos como la única forma de escapar de nuestros problemas, aunque sea para olvidarlos un par de horas y luego tenemos que volver a la realidad que está muy alejada de la fe y de lo perfecto.


SI PUDIESES REPRESENTAR, EL PERSONAJE DE SAN MANUEL BUENO Y MÁRTIR EN NUESTRA SOCIEDAD ACTUAL, ¿QUIEN CREES QUE POSEE SUS CARACTERÍSTICAS?

El engaño y la mentira son las dos principales características de San Manuel, como es posible que un hombre tan bueno con la gente de su aldea sea capaz de engañar sus vidas y sus corazones. Creo que la forma en como trataba el protagonista a sus seguidores los hacía ver como si para él fuesen inferiores e incapaces de soportar la realidad, de entender lo que él realmente sentía y creía de la fe, o mejor dicho lo que no creía de ella.

Tras esto, creo que quién calza dentro de estas características es ese típico hombre de negocios sin necesidades económicas, que todo sus problemas los solucionan con dinero incluso los que no debiesen hacerse de esta forma, se esconden en sus bienes y en sus lujos; esa es su fachada pero en su interior realmente hay un problema, una pena, quizás una enfermedad las cuales ni todo el dinero del mundo podrían remediarlo.

Este tipo de personas además se creen superiores al resto de la gente, lo mas probable es que sean los dueños de una empresa y a su cargo tengan a muchos trabajadores, de ellos dependerá su sueldo y por esto se creen con el derecho de tratarlos como deseen, incluso creyéndolos incapaces de mas, viven “en una mentira del progreso” debido a que en sus superiores está la posibilidad de continuar surgiendo, ya que, son ellos los que tienen el control y saben que no se “sublevarán” en el camino porque no les conviene.

Quizás mi gráfica de representación no sea de la misma índole, pero en su sentido de ingenuidad y inferioridad acatan completamente las actitudes de San Manuel.


¿CÓMO EXPLICA USTED EL COMPORTAMIENTO DE SAN MANUEL BUENO Y MÁRTIR?

San Manuel Bueno y Mártir, a los ojos de la aldea y de sus habitantes era el hombre perfecto, “una especie de elegido de Dios” del cual quien siguiese su camino y estuviese a su lado sólo cosas buenas podrían sucederles, era un consejero, un amigo, un predicador, un todo; pero su fachada nada tenía que ver con sus sentimientos, mi explicación mas lógica ante su comportamiento de hombre divino es el hecho de creerlo realmente un cobarde por no ser capaz de decir su verdad lo que pensaba y sentía.

En su creencia de sentir que si aquellos habitantes no tenia en que o quien creer no podrían seguir adelante, alimentando una mentira del cual no se sentía parte en plenitud me parece desastroso, por ende, cabe de cajón que su comportamiento no correspondía a lo que sus adherentes merecían en realidad, subestimaba de mala manera a quienes día a día le confidenciaban sus anhelos, errores y alegrías, lo hacían parte de todo lo que ellos consideraban que tras su fe y buenas acciones estaban logrando de a poco. E incluso tras la llegada de Lázaro y sentirse amenazado por el descubrirse su verdad prefirió confidenciarle sólo a el lo que realmente le ocurría en vez de acabar con la farsa y contar a todos su verdad, quizás la gente lo hubiese entendido, quizás no pero siempre se tendrá la duda de aquello.

Yo en cambio, lo único que puedo agregar al respecto que personas como San Manuel que “juegan, o de una u otra forma se burlan de las creencias de los demás no son personas dignas de imitar bajo ninguna circunstancia “ siempre es mejor ir con la verdad por delante, en caso de que ella te lleve a algún error o dolor uno lo máximo que sentirá es la sensación de una caída pero todos lo hacemos y nos volvemos a parar que mejor que creer en nuestras propias convicciones y estar convencidos que todo camino que se tome nos llevará a un crecimiento y en palabras como diría Frank al sentido de la felicidad”.


miércoles, 19 de mayo de 2010

EDUCACIÓN 2020

SE ACABÓ EL RECREO


EDUCACIÓN, EL PRIMER PROYECTO PAÍS AL ININCIO DEL TERCER CENTENARIO

INTRODUCCIÓN

Este documento propone una revolución en la calidad y equidad de la educación en Chile. Se trata del primer proyecto país que todos los chilenos, independientemente de nuestras inclinaciones políticas, actividad y condición socioeconómica, debemos llevar adelante al comenzar el tercer centenario de nuestra Nación.

Proponemos que la década 2010-2020 sea la década de la educación. Para lograrlo es indispensable y urgente iniciar el camino de inmediato, concretando en el 2009-2010 una “agenda corta”, que constituye la ruta crítica, referida a asuntos que no pueden esperar ni un día más. Cada mes que se retrasen en su inicio, significa un mes más de atraso en el desarrollo educativo de varias generaciones de niños y jóvenes.

No estamos partiendo de cero. De hecho, a excepción de Cuba, Chile tiene -comparado con nuestros vecinos latinoamericanos- uno de los mejores rendimientos en las pruebas internacionales de educación[1]. De igual manera, en las últimas décadas, se han logrado aumentos significativos en la cobertura a todo nivel. En promedio, las remuneraciones de los docentes, comparadas con las que tenían hace 15 años, se han duplicado, y de hecho, en relación a nuestro PIB per cápita, no son significativamente diferentes de las de países avanzados, aunque son significativamente más bajas a las de otras profesiones.

Sin embargo, a pesar de los esfuerzos y avances[2], la reforma educativa no ha dado los frutos esperados en calidad ni equidad. Uno de los problemas esenciales estriba en que la inequidad de Chile es enorme, muchísimo mayor que la de países avanzados, en materia geográfica, de género, ingresos, distribución salarial entre distintas profesiones, años de escolaridad, y también en rendimiento educativo de nuestros escolares. Asimismo, el nivel de Chile en las pruebas internacionales de educación como TIMSS o PISA está muy por debajo de los resultados de países avanzados, y la inequidad interna en los resultados, también.

Una diferencia de 136 puntos en TIMSS o PISA, o una diferencia en SIMCE de 13 puntos[3], dice poco a muchos ciudadanos. Sin sacralizar las pruebas estandarizadas de medición, siempre perfectibles, estas diferencias señalan la distancia que nos separa de un país educativamente más equitativo, que pueda competir y crecer en un mundo globalizado, y desarrollar mejor sus valores ciudadanos, de solidaridad, confianza, democracia, rigor y respeto por los derechos de los demás.

Para ver con realismo y crudeza el abismo que nos separa de los países avanzados, es indispensable conocer algunos datos que resultan elocuentes...


El 6% de los alumnos chilenos con más recursos no supera el promedio general internacional[4], y 2 de cada 5 escolares terminan 4º básico sin comprender lo que leen[5]. No estamos mejorando en equidad, sino empeorando: la brecha entre el 20% de peor y mejor resultado del SIMCE se incrementó en 13 puntos en Lenguaje y 16 en Matemáticas entre 1999 y el 2006. Esto, sin duda, aumentó la inequidad educativa[6].

En lo que se refiere a la formación de profesores, hay problemas en distintos niveles: el 40% de los alumnos que ingresa a estudiar pedagogía no puede extraer conclusiones de un texto simple[7]. Cuando se transforman en profesores, siguen sin poder hacerlo

¿Puede un país con esta realidad educativa enfrentar con optimismo, esperanza y orgullo su tercer centenario? El sentido común dice que no. Todos los informes internacionales sobre Chile han venido reafirmando esto por décadas.

¿Cómo hemos llegado a esta situación, en un país que ha mostrado avances notables en muchos aspectos? Hay quienes opinan que se debe al modelo económico. Hay quienes culpan a los profesores. Unos culpan al mercado, otros al Estado. La verdad es que se trata de un tema altamente susceptible a las diferencias ideológicas y que requiere de soluciones ambiciosas que se postergan sistemáticamente, porque en educación los resultados se materializan en el largo plazo, mientras sus costos políticos y financieros son siempre de corto plazo.

En medio de las disputas ideológicas, hay medidas evidentes, indispensables en cualquier escenario, que han sido propuestas una y otra vez por expertos nacionales e internacionales, que se aplican en otros países y que pueden tener resultados ciertos.

Estamos plenamente conscientes de que la enorme inequidad en Chile hace muy improbable que un niño de una población marginal pueda aspirar a las mismas oportunidades educativas y laborales que un niño de barrio acomodado. Estamos también conscientes de que hay discusiones no resueltas en relación con el carácter público o privado de la educación, la institucionalidad educativa, o la selección de alumnos en escuelas y universidades. Nuestra impresión es que la probabilidad de que ellas se resuelvan en los próximos años es baja.

Nada de esto justifica que no hagamos -todos juntos- lo posible y lo imposible por otorgar una mayor igualdad de oportunidades a nuestros niños y jóvenes, modificando las condiciones actuales que se dan al interior de la escuela, para ofrecer a cada uno la mejor educación posible, sin importar origen y condición social. La evidencia es clara: una muy buena escuela es capaz de corregir en buena medida las desigualdades de origen que traen sus estudiantes[8].

La propuesta que hacemos es factible, siempre y cuando las distintas fuerzas políticas del país, así como el gremio docente y la sociedad toda, acepten un pacto de largo plazo, de aquí al 2020, para concretar estas medidas, independientemente de proseguir la discusión respecto a temas como los arriba mencionados.

Estas propuestas no son nuevas, como ya lo dijimos. De hecho, como resultado del impetuoso movimiento estudiantil del 2006, expresión clara de desencanto ciudadano por esta situación, se formó una Comisión Asesora Presidencial, que logró importantes acuerdos y recomendaciones sobre muchos aspectos que aún no se materializan. No es entonces de extrañar que varias de las medidas aquí formuladas se asemejen a aquellas que son fruto del trabajo de dicha Comisión.

La novedad mayor radica en dos aspectos: primero, el carácter sistémico y simultáneo del paquete de propuestas que debe concordarse como pacto nacional de largo plazo y, segundo, el apoyo ciudadano que está suscitando esta revolución sobre la calidad y equidad de la educación chilena.

Resulta indispensable que estas propuestas se adopten de manera integral. La calidad de la educación no se resolverá aumentando los recursos pero manteniendo la formación pedagógica y la Carrera Docente en el estado actual.

Reformular la Carrera Docente sin aumentar los incentivos y la rigurosidad de las evaluaciones será también un ejercicio ritual. Mientras dicha Carrera no sea verdaderamente prestigiosa, bien remunerada y de mayor calidad formativa, habrá escasos alumnos de excelencia egresados de enseñanza Media dispuestos a ingresar a esta carrera y, si lo hacen, terminarán retirándose en plazos breves, debido a sus condiciones salariales, la dura realidad de las escuelas vulnerables y el deficiente liderazgo y carencia de atribuciones de sus directivos. Aumentar la subvención diferenciada sin buenos directores no resuelve nada. En suma, si se intenta legislar o presupuestar estos temas por separado, siempre habrá suficientes objeciones para frenarlos. Cabe destacar, además, que los planteamientos que estamos haciendo abarcan la crítica educación preescolar, la Básica y la Media.

Las propuestas, como señalan nuestros planteamientos iniciales, están agrupadas en torno a 4 pilares fundamentales a) Profesores de excelencia, b) Directores de nivel internacional, c) Condiciones adecuadas para las aulas vulnerables, d) Apoderados informados y participativos. Estos cuatro pilares sólo pueden sustentarse en un sólido financiamiento público que resulta imprescindible para la materialización del conjunto de las propuestas.

A fin de indicar la dimensión del esfuerzo requerido, este documento expande y detalla de manera somera, pero no por ello menos concreta, cada una las propuestas, incluyendo órdenes de magnitud y secuencia de los recursos que se requieren.

Inevitablemente, las reformas planteadas representan un incremento significativo de financiamiento público, una inversión crucial que, por cierto, no podrá provenir de la dotación normal de recursos fiscales. Los problemas centrales de educación no se resolverán realizando solamente las reformas indispensables a la eficiencia del sistema educativo. Es simplemente imposible resolverlos con 55 mil pesos mensuales por niño vulnerable.

Estas reformas requieren que Chile se meta la mano al bolsillo para proveer una verdadera igualdad de oportunidades a los niños chilenos, y alcanzar el anhelado desarrollo del país.

Conscientes de la grave crisis financiera internacional, de inevitables e inciertas repercusiones a nivel nacional, proyectamos que el grueso del gasto adicional necesario comience a materializarse a partir del 4º o 5º año desde el inicio del proceso, que ojala fuera hoy mismo.

La segunda novedad de estas propuestas es el apoyo ciudadano que despertaron. Más de 33 mil personas han expresado hasta ahora su apoyo formal a los planteamientos de Educación 2020, inscribiéndose -con su nombre y RUT- en nuestro sitio www.educacion2020.cl. Aproximadamente 5 mil de los adherentes son profesores y educadores de párvulos. Paralelamente, otras 60 mil personas se han sumado a través de distintos sitios web sociales como Facebook. Muchos son los líderes de opinión, académicos y representantes de todos los colores políticos que las están apoyando.

Las autoridades políticas, a través de la iniciativa ejecutiva y la negociación legislativa, son los encargados de materializar estas propuestas y establecer con precisión los recursos financieros necesarios. El pacto político nacional de largo plazo que proponemos otorgará el respaldo necesario a estas acciones.

Hacemos un llamado a leer las propuestas de Educación 2020 de manera constructiva. Si bien estamos plenamente convencidos de su validez, no pretendemos ser los poseedores de la verdad, y estamos abiertos a su discusión y perfeccionamiento. Confiamos en que este llamado sirva para deponer nuestros prejuicios y desconfianzas, y avanzar desde la discusión a la acción inmediata.

Exigimos de parte de las autoridades políticas del país -presentes y futuras- la atención, estudio y respuesta a nuestros planteamientos y las convocamos a firmar un pacto nacional para impulsar reformas concretas en el período 2009-2020. De igual manera, exigimos del Poder Ejecutivo una respuesta a los planteamientos de nuestra Agenda Corta de propuestas específicas y urgentes para el 2009-2010.

El futuro de los niños chilenos, y por ende del país, depende de la capacidad de todos para generar consensos de largo plazo y tomar decisiones inmediatas para avanzar en esa dirección.



[1] Ver, por ejemplo, “Los aprendizajes de los estudiantes de América Latina y el Caribe”, Reporte de resultados del SERCE; LLECE-UNESCO, 2008.

[2] Un listado de las reformas puede verse en “Liderazgo Directivo, asignatura pendiente de la reforma educacional chilena”, de José Weinstein, 2008.

[3] Ver resultados de pruebas estandarizadas nacionales e internacionales TIMSS y PISA en las que ha participado Chile, en www.simce.clw.simce.

[4] Según resultados TIMSS 1999.

[5] Juan Eduardo García-Huidobro, en revista Mensaje julio 2008.

[6] Juan Pablo Valenzuela, Programa de Investigación en Educación de la U. de Chile, en La Tercera 08 junio 2008.

[7] “Desarrollo de habilidades básicas en Lenguaje y Matemáticas en egresados de pedagogía. Un estudio comparativo”, CSE, 2007 (www.cse.cl).

[8] Ver, por ejemplo, “La Investigación sobre Eficacia Escolar en Iberoamérica. Revisión Internacional sobre Estado del Arte”, F.J. Murillo, 2003; también, “Informe de Capital Humano en Chile”, J.J. Brunner y G. Elacqua, 2003; y la extensa literatura sobre eficacia escolar o escuelas efectivas.

Primer Artículo "Educación 2020"

Antes de comenzar detenidamente mi análisis sobre el primer artículo “Educación 2020”, quisiera recordarles que mis tres artículos que deberán ser expuestos durante el transcurso de la asignatura serán sobre este mismo tema, ya que, éste es un proyecto desde mi punto de vista interesante y que aborda muchos puntos, de los cuales ninguno es mas importante que el otro y por tanto todos deben ser analizados de forma particular, y obviamente también tienen un puesto dentro de mi blog.

Análisis sobre Educación 2020.

Quisiera comenzar este análisis refiriendo unas palabras de Kant, las cuales también fueron enunciadas dentro de clases y es que “el hombre sólo por la educación llega a ser persona”. Y tras este punto señalo entonces que, la educación perse, es un área de vital importancia para todos los chilenos, por tanto, sus problemas también nos atañen de forma directa.

El proyecto a analizar a continuación, que comenzó bajo el gobierno de la presidenta Michelle Bachelet, nos propone como meta y en un plazo determinado que … El 20% más pobre de los estudiantes tendrá la misma calidad de educación que el 20% más rico en el año 2020”[1].



Como vemos, dicha medida tampoco es definitiva, ni mucho menos a la cual podrán aspirar todos los estudiantes, es un comienzo a un problema grave que necesita de medidas extremas para poder ir solucionando de a poco , esto se debe a que dentro de la educación existen varias falencias que deben ser esclarecidas y solucionadas.

Para comenzar, diremos que como respaldo y a diferencia de la educación en Cuba, tenemos uno de los mejores rendimientos en las pruebas internacionales de educación. Por otro lado, tenemos la parte, de remuneración del docente, de la cual me es posible decir que en promedio y comparación a las de hace 15 años, se han duplicado, y no muy diferentes de las de países mas desarrollados, pero sí son claramente más bajas en comparación a otras profesiones.

… Pero seamos realistas, en lo personal e independiente de las problemáticas externas de la educación para mí el mas importante y del cual de una u otra forma se desprenden los demás, es la excesiva falta de equidad en nuestro país y que termina en el reflejo de la pésima calidad de la educación en Chile; estos se observan en: materia geográfica, de género, ingresos, distribución salarial entre distintas profesiones, años de escolaridad, y también en rendimiento educativo de nuestros escolares”[2].

Después de observar detalladamente los gráficos sobre la prueba TIMSS o PISA anteriormente expuestos, solo me cabe decir es que me resulta poco menos que increíble y a la vez una pena que existan tales falencias en aspectos tan importantes sobre la educación, para comenzar la brecha con los países mas avanzados es altísima, por lo tanto lo son también sus resultados; nuestro mínimo conocimiento en la asignatura de matemáticas, los bajos puntajes que entran a las universidades a estudiar pedagogías en general (en el caso anterior, específicamente básica), y en como las ponderaciones mas altas ni siquiera piensan en la opción de elegirla como profesión futura, en que ocupamos el penúltimo lugar en la Prueba PISA que mide el conocimiento referido a la lectura y dentro de ello sólo el 6% de los estudiantes con altos recursos no logra superar el promedio internacional, que cada 2 de 5 alumnos de 4º año de enseñanza básica pasan de curso sin siquiera una minima comprensión de lo que leen, en lo que al SIMCE se refiere la brecha entre los años 1999 y 2006 aumentó en 13 puntos en leng. Y 16 puntos en mate.

Y por último, decir que el 40% de los estudiantes que se están formando para ser futuros docentes no puede extraer conclusiones de un texto simple esto resulta por lo menos inaudito y una vergüenza a la vez. Peor aún cuando se llega a la conclusión explícitamente comprobada que luego de egresados estos “titulados profesores” continúan sin poder hacer dicha extracción de idea central de texto.

Tras esto definitivamente, lo único claro de observar es que cada vez se hace mas grande la barrera de equidad en nuestra sociedad sino, en cambio empeora cada día mas, en donde los únicos y mas afectados son los estudiantes ahora actuales y los de generaciones futuras porque desgraciadamente este tema tiene una difícil y ardua tarea por resolver.

Recordemos que mas allá de nuestra propia vergüenza por los resultados anteriores y la nuevamente referida inequidad de la educación esto también nos separa en temas de “competencia y crecimiento en el mundo globalizado del cual de una u otra forma somos participes”, lo cual no es menor, y por tanto debemos intentar estar a la altura, pero por lo visto no es realmente posible.

Si nos ponemos a pensar de forma seria en esto último, diremos que no es posible seguir tan estancados en el área educacional tomando en cuenta los grandes avances tecnológicos de los cuales somos espectadores y muchas veces consumidores, entonces quizás la respuesta sea que damos una prioridad errada a ámbitos no tan trascendentales para y no a lo realmente importante, de lo cual sacaríamos un provecho a largo plazo aún mayor; ya que al tener personas bien preparadas educativamente hablando, serán luego excelentes profesionales que en su desempeño laboral ayudarán e irán en pos del desarrollo de Chile.

La única forma de cambiar esto es acabar con las problemáticas y las deficiencias anteriormente mencionadas, para esto todos debemos ayudar, ya sea, el estado con mucho mas apoyo económico (pero tampoco se puede llevar todo la carga, debido al excesivo costo que demanda actualmente la educación, tanto por sus falencias ya críticas las cuales necesitan del apoyo de todos los ciudadanos.

Pero el problema de la educación no es sólo la falta de dinero, entonces a quienes hacemos responsables ¿a quien más culpamos?, “la educación no tiene colores políticos por lo tanto no es un privilegio de ricos y pesar de pobres sino un derecho de todos y para todos por igual”; suena bonito e incluso tiene un porcentaje de verdad dicho comentario, pero en la práctica resulta que aunque todos nos educamos, no recibimos la misma calidad de educación, y el dinero prima por sobre el que no lo tiene y la diferencia entre colegios particulares y municipales no es menor a la hora de ser medidas tras los puntajes de pruebas SIMCE o PSU en donde los colegios pagados llevan una buena delantera.

Por otro lado, tenemos la triste realidad de la pedagogía, ya no es una carrera demandante en el sentido de estar entre las primeras preferencias para ingresar a la universidad, esto sumado a los bajos puntajes que son aceptados para entrar a la carrera y que si la elección realizada no es por el sentido adecuado “la vocación” podría tener como repercusión “profesores poco gratos en su oficio y por ende mal preparados, sobre todo en la parte pedagógica”

Es verdad a la hora de ejercer cualquier tipo de profesión hablamos de que hay que tener vocación, pero al referirnos al a docencia el “sentido que toma esta palabra es distinta”, ya que, no todos tenemos “la vocación de enseñar y aprender del otro”; o como lo explicita Viktor Frank en su ensayo y la importancia de la “búsqueda de sentido” la cual te llevará al encuentro de la “felicidad y plenitud”. Todo esto en el caso del profesor radica en que nuestro sentido es “esa pasión por educar al otro”.

También tenemos el tema de la remuneración del profesor, tratado también en la clase anterior y reflejaba la poca variación porcentual anual de lo que se gana estando fuera de la universidad como egresado, o sea es demasiado baja para todo el trabajo que desempeñan. “somos nosotros los segundos formadores mas importantes en la vida de una persona, que al crecer identificará su camino y su profesión, les entregamos las herramientas para desenvolverse de la mejor forma dentro de esta sociedad competitiva de manera de que salgan al “mundo globalizado” preparados para todo.

Educación, falencias, dinero, profesores, calidad, todas unidas y que llegan como consecuencia a la persona más importante el alumno; es de ellos de quienes no debemos olvidarnos y luchar para que tengan y tengamos las mejores oportunidades dentro de la formación y en el ejercicio de profesión.

“Tras toda esta filosofía y reflexión sobre esta realidad problemática que nos atañe directamente, lo único que me queda por decir es que, si lo mas importante es el individuo lo correcto es que tenga todas y las mejores herramientas para que se desarrolle en sociedad por tanto debe tener una educación digna de él”


[1]MANIFIESTO EDUCACION 2020.pdf